Trabajo Decente?

Hacía rato que tenía olvidado este roto, todo por culpa del tuiter ese, que se traga mis ideas trino a trino.

Aunque la verdad este post lo tenía arrumado desde hace bastante tiempo, por pereza mental no me había atrevido a darle caña al asunto, pero bueno, hoy estoy motivado, ha de ser la ausencia de alimento y las cantidades industriales de tinto que he consumido hoy, en fin, al grano.

Si sabían que pasado 7 de octubre fue la jornada mundial por el trabajo decente? Para medio explicar lo del trabajo decente me voy a dar la tarea de fusilar, algunas cosillas que salen por interNerd:

La primera utilización expresa y formal de la expresión trabajo decente se daría en la Memoria de Juan Sornavía, Director General de la OIT a la Conferencia Internacional del Trabajo de 1999.

Trabajo decente es: un trabajo productivo en condiciones de libertad, equidad, seguridad y dignidad, en el cual los derechos son protegidos y que cuenta con una remuneración adecuada y protección social. El trabajo decente se caracterizaría por los siguientes componentes:
a) trabajo productivo;
b) con protección de derechos;
c) con ingresos adecuados; y
d) con protección social;
e) caracterizado por el tripartismo y el diálogo social.

Para poder garantizar trabajo decente es necesario cumplir con ciertos objetivos estratégicos tales como:
a) la promoción de los derechos laborales;
b) la promoción del empleo:
c) la protección social contra las situaciones de vulnerabilidad;
d) el fomento del diálogo social.

El término fue introducido como respuesta al deterioro de los derechos de los trabajadores que se registró mundialmente durante la década del 90, como consecuencia del proceso de globalización y la necesidad de atender la dimensión social de la globalización.

Ahora vengo yo haciéndome un pequeño pajazo mental al respecto.

Que consideramos los colombianos como trabajo decente?, hace algún rato me puse a preguntarle a algunos amigos y amigas que pensaban al respecto y en resumen salió que el trabajo decente era aquel diferente a la prostitución, el sicariato o aquellos que se encuentren al margen de la ley.

Es decir que el que limpia vidrios en los semáforos, el malabarista, el que se sube a cantar o a vender en un bus posee un trabajo decente?, da risa lo que nuestro gobierno piensa del tema.

Aquel obrero subcontratado de construcción que le toca moler de las 6 de la mañana hasta las 6 de la tarde sin riesgos profesionales?, o que diríamos de un médico atado a lo que dictamine el que sabe de plata pero que no tiene puta idea de salud?, la operadora de call center que con un mínimo de entrenamiento termina mal informando y de paso debe aguantar nuestros improperios?.

Incluso podríamos dar ejemplos a nivel medio y en no pocas ocasiones con los tan repudiados asesores, quienes son puteados tanto por sus jefes como por la gente que tienen a su cargo, hay que ver que si los que trabajan en soporte técnico o mesa de ayuda que llaman, tienen mamá de caucho, estos deberían tenerla de adamantium.

Pongamos un ejemplo más chévere de trabajo decente, el caso de aquellas empresas que usan el contrato de aprendizaje para llenar sus plantas de aprendices y cada cierto tiempo andar rotando, m explico: a un aprendiz en etapa práctica se le paga el 75% del salario mínimo, así el empresario va ganando por volumen, mantengo una planta fija de gente y respecto a ese número de trabajadores tengo un plantilla que voy rotando cada cierto tiempo con un menor costo de nómina.

No digo que sea una práctica generalizada, pero ya va tomando ese cariz, arguyendo un “apoyo” al crecimiento del empleo, seehh como no moñito.

Si realmente estuviéramos metidos en el cuento del trabajo decente, muchas empresas serían boyantes incluso en medio de esta crisis de la cual ya llevamos casi 10 años metidos, un trabajador con un empleo decente sería más dedicado a su empresa, incluso la defendería. No como algunos sindicalistas petardos que en vez de ayudar a salir adelante a las empresas que les dieron medios para conseguir techo y comida, terminan hundiéndolas.

El trabajo decente crea una real simbiosis entre los empresarios y sus empleados, si lo vemos en detalle cada uno necesita del otro, es un casorio de esos en donde nos tenemos que hacer pasito para que las cosas funcionen, de lo contrario terminan emproblemados y jodidos ambos.

he dicho.


.

Comentarios

Ivan Andrade dijo…
Estamos de acuerdo. Pero aquí seguimos dejando que nos metan la mano. Y además los premiamos con reelecciones. Así no hay forma de mejorar las vainas.

Suerte.
Amalia Lateano dijo…
Muy interesante. te conozco por Gaceta. Mando mis poemas y no me publican. No sé si hago bien el procedimiento
http//amalialateano.blogspot,com
Besos
Amalia

Entradas populares