Pasó dicembre con su alegría...

Bueno como dice el cuento, pasada la fiesta, que venga el chismorreo.

Como parece ser costumbre de muchos blogueros el comentar las aventuras vacacionales, pues me sumaré al montón chicaniando vacaciones.. así que ahí les va.

No hice ni mierda !!, todo por culpa del sereno, pues me tocó sacar de donde no tenía para poder subsanar los gastos básicos decembrinos (servicios, el mercado, la culebra de fin de año, los arreglos del vividero, etc.) así que me negué a darme vacaciones decembrinas. El lío, era que estaban programadas del 22 de diciembre hasta el 16 de enero, depronto por la gracia divina acudió a mi la voluntad de mi jefa y sus arranques viscerales estrategias (no es machismo, la mujeres son pasionales, peor cuando son tu jefa, y cuando uno se las tira de artista...). así que de providencial brochazo me las puso en periodo donde todo mundo está sin un peso: desde reyes hasta finales de enero, así no tendré impulsos asesinos contra la señora que amablemente se dignó a guardarme mi platica hasta "cuando el infierno se enfríe", o pase lo que nos pasa a los que ya rondamos los 10 años de servicio (después les explico).

Mucha gente dice que uno disfruta la cuidad en diciembre, que el trafico fluye mejor.. pura carreta! cada vez que iba a trabajar el transporte estaba atestado, y en mayor proporción que de costumbre, pues ya no era el trabajador, sino la esposa, los chinos, y el que está de visita; con tren de paquetes y de ñapa fastidiando al güevón mas cercano que se encuentre disfrutando de un libro en el trayecto a la casa; a eso súmele que hacer mercado pasa a ser la unión de todos los círculos del infierno en unos cuantos metros cuadrados, así que vamos contando; ya ahora que ando de gusano en la casa, entonces cada nada aparece la ladilla de mi suegra a terminar de malcriar a la hija me las entrañas de mi esposa, a ver que hay de almorzar, y a hacer la interpretación mas paupérrima de Anton Ego que haya podido presenciar.

Así que ando revelado estos últimos días de infernal descanso, acudí a la única que ocupa mi mente con el fin de no saltar por la ventana: mi ludopatía, negrié el emule, bajé cuanto juego pudiera, ahora ando, como se dice en el argot "descunchando" juegos, convertí mi mundo de enojo, en un mundo fantasioso de 24 pulgadas, así que apenas aparece mi esposa a eso de las 6 de la tarde, le endoso la nena, con la casi misión imposible de dormirla, y me entrego a mi mundo por unas cuantas horas, solo para poder tener ánimos de levantarme al día siguiente, pues hay misiones pendientes...

Pues sí señor que estas son mis "vacas", el único chiste que tienen es que le puedo ver todo el día los cachetotes a la renacuaja que tengo por hija, que ya le gusta la sopa al igual que a su papá, y que por fin me anime a escribir en el blog para chicaniar mi fin de año.

Y que tal sus vacaciones... si "pasiaron"?